Abstract
Este ensayo, dedicado a las doctrinas psicológicas de Alejandro, se divide en tres partes: la primera ilustra, a través de ejemplos tratados por el De anima, la concepción que tenía Alejandro de su actividad filosófica. Dado que Aristóteles ha transmitido las doctrinas más verdaderas, cree Alejandro, lo que hay que hacer es simplemente exponerlas de nuevo del modo más claro y completo, valiéndose de todo lo que dice Aristóteles respecto de las funciones psíquicas, incluso en obras diferentes del tratado principal. La segunda parte del ensayo se centra en la sección inicial (1-26 Bruns) del tratado alejandrino, donde principalmente se prueba que el alma, como cualquier otra forma, es sólo la conjunción de las capacidades del cuerpo, cuya forma es el alma. Más aún, argumenta Accattino, tales capacidades anímicas nunca pueden expresarse independientemente del cuerpo, y menos aún con la desaparición del cuerpo. Por lo tanto, como forma del cuerpo, el alma es completamente mortal. La otra tesis célebre de Alejandro (la identificación del intelecto activo con el dios aristotélico de Metafísica Lambda) es tratada por Accattino en la tercera parte de su ensayo. Allí examina la noética del De intellectu de Alejandro y la sección dedicada a la noética en su De anima (80, 16-91, 6). En esta parte de su artículo el autor aclara, primero, los términos usados en la noética alejandrina (intelecto en potencia o intelecto “material”, intelecto entendido como “hábito”, intelecto “que viene de afuera”, el intelecto “agente”); luego ilustra el modo en que Alejandro da cuenta de la actividad intelectiva del intelecto humano y, finalmente, se concentra en el papel diferente que atribuye al intelecto agente (o el intelecto “que viene de afuera”, identificado por Alejandro con el intelecto divino) en el De intellectu y en la sección del De anima, respectivamente, de modo de mostrar que la posición más madura de Alejandro es la indicada en el De anima.