Abstract
Armado de espíritu crítico y una espléndida formación en el universo de la filosofía hermenéutica, en los desarrollos de la filosofía contemporánea, así como en pedagogía y sociología de la educación, Joaquín Esteban Ortega elabora en Memoria, hermenéutica y educación una reflexión equilibrada, imbuida, por una parte, de la vocación totalizadora de la filosofía como pensamiento sobre la actualidad, y por otra de la actualización del saber históricamente acaecido que toda reflexión filosófica implica: es justo, pues, atribuir inteligencia al interés del lector de hoy día por las perspectivas multidisciplinarias. Ahora bien, cuando confrontamos esta tendencia actual a favor de la complejidad interdisciplinaria con la desmemoria, dogmatización o anquilosamiento y fundamentalización de tradiciones con las que, en ocasiones, se afronta la misión socializadora de la educación, entonces nos encontramos con que es de justicia acercar la filosofía a la educación. La motivación última del libro es mostrar la voluntad de divergencia, de diferencia, de la filosofía y de la educación y de qué modo: método y razón de ser de una y otra convergen en el paradigma hermenéutico. Mas vayamos por partes, ya que se requiere de una contextualización previa para comprender la razón de ser de esa conciliación entre estos dos saberes.