Abstract
Con el objetivo de reivindicar la importancia de lo que de irrenunciable, esencial e histórico reside en el ethos jurídico, en este trabajo reflexionaremos sobre las virtudes que en la actualidad siguen presentando algunas tendencias filosófico-jurídicas. Aunque la oposición entre modelos iusnaturalistas y propuestas iuspositivistas se haya convertido en un eterno debate – desde donde algunos intentan escapar y donde otros buscan refugio –, intentaremos sostener la conveniencia de un posible patrón mixto, que definiremos discreto y templado, una arquitectura sensata y respetuosa para el derecho del futuro, que es, en realidad, el derecho del presente. La fascinante relación entre las categorías viquianas del certo y del vero nos servirá como guía para rescatar una aproximación a lo jurídico que sepa combinar su innegable corte histórico-concreto, su calibrada carga metafísica y su indispensable formalidad procedimental. Todo ello, con el fin último de seguir apostando por lo que de humano reside en el derecho.