Abstract

Queremos pensar nuestro tiempo y pensamos a nosotros mismos. Queremos hablar y escuchar porque tenemos algo que decirnos. Queremos seguir reflexionando sobre lo que significa una comunidad cultural iberoamericana y, dentro de ella, qué significa pensar en español. Como dice Ernesto Garzón Valdés: "queremos pensar sin descuidar nuestra tradición filosófica y sin olvidar desde donde reflexionamos". A estas alturas del proceso ya sabemos lo que tenemos que evitar: el casticismo que lleva al provincianismo y lo abstractamente universal que esquiva la realidad. Queremos pensar los temas de nuestro tiempo situadamente y para ello nada mejor que dejarse guiar por el lenguaje que compartimos: el español o el portugués. [Fragmento]