Abstract
Es un lugar común considerar a Voltaire como un crítico de Castel de Saint‒Pierre y uno de los principales responsables de la recepción de su imagen como la de un promotor de ideas impracticables, en particular su proyecto de paz permanente entre las naciones. El objetivo de este artículo es mostrar que, en cualquier caso, la interpretación que hace de los escritos del abate es menos simple de lo que se puede pensar en un primer momento. El trabajo busca poner de relieve los desplazamientos y torsiones que la figura de éste sufre en los escritos del filósofo francés, especialmente a partir de los años 50’, momento en el que revaloriza algunos aspectos de su obra. Por otra parte, el texto arroja algunas luces acerca de lo que podría considerarse el proyecto de paz del propio Voltaire.