Abstract
¿Cuál debe ser la actitud de un pensamiento genuinamente postmoderno ante el fenómeno religioso? ¿Debe contribuir a desterrarlo de nuestras sociedades o, por el contrario, debe colaborar en su emergente renacimiento? La filosofía de Gianni Vattimo constituye una respuesta a esta disyuntiva desde una perspectiva que pretende distorsionar tal dicotomía. La idea clave para ello es el concepto de secularización que a la vez que reconoce nuestra dependencia, como occidentales, de un cierto discurso religioso, lo debilita con el fin de eliminar de él su violencia. El presente artículo analiza someramente estas ideas y traza algunas de sus conexiones con el pensamiento teológico más reciente, para después reseñar algunas de las consecuencias que han tenido en los debates filosóficos hispanos.