Abstract
Avanzar hacia un pensamiento de la materialidad que no tenga por finalidad definir un _modo de ser _de la materia, no es tarea fácil. Sin embargo, en el contexto de una lectura estereográfica de Jacques Derrida y Werner Hamacher se pretende _experimentar_ la materialidad como la venida de un elemento imposible, indecidible y anárquico que, al objetar la pregunta por la esencia, se inscribe en el sistema especulativo para trastornarlo y desencadenar _en_, y _desde_ él, un «razonamiento bastardo» capaz de atravesar las envolturas con que la _metafísica _había separado en lo inteligible mismo lo empírico de lo trascendental.